César álvarez siempre acompañado de su portátil de "comandos" amarillos

La orgía (política) perpetua

A propósito del debate sobre la no reelección regional inmediata

"Las elecciones deben ser postergadas 300 o 400 años, pues se necesita no un gobierno de hampones democráticos, sino un gobierno honesto y justo”.

-Jorge Luis Borges. De Diccionario de Borges, Carlos Stortini, 1986-

Publicado: 2014-04-25

La pregunta que atarea a todos los politólogos actualmente es quién podría suceder a los expresidentes que competirán en las próximas elecciones nacionales. Hemos llegado al punto de tener candidatos vitalicios como Alan García, quien cuando no está gobernando en palacio lo hace desde Alfonso Ugarte. El caudillo aprista incluso impone la agenda política gracias a los medios de comunicación y torpedea toda gestión, como lo hizo con Toledo y ahora con Humala; ¡y hasta lanza mensajes a la Nación sin ser presidente! 

Esto sucede no solo por la patología de poder que padece García, sino también porque el Apra no tiene "mejor" candidato para competir en las siguientes elecciones. Lo mismo sucede con Toledo en Perú Posible; ¿quién podría acarrear más votos para la chacana? ¿Y las encuestas favorecerían al fuijimorismo sin ese liderazgo carismático-familiar de la hija del dictador? No. Todo esto sucede porque los partidos políticos en el Perú son apolíticos. 

Por ejemplo, en Chimbote, Perú Posible no tenía ni siquiera un local partidario hasta hace unas semanas que empezó la campaña para las elecciones regionales y municipales. De un día a otro aparecieron candidatos a la provincia y el distrito apadrinados por el congresista comando Víctor Crisólogo, defensor de César Álvarez en el Congreso al igual que Heriberto Benítez. ¿Los candidatos hicieron vida política antes? ¡No, porque ni siquiera existían secretarías provinciales ni distritales! Hasta tuvieron que prestarse un candidato para la región que había participado en las elecciones pasadas.

Estas son las consecuencias de que los partidos políticos sean maquinarias de campaña que resucitan solo en periodos electorales. Si Perú Posible en Chimbote hubiese trabajado políticamente durante los tres años desde que perdió los últimos comicios, habría formado y elegido a un representante de su propio partido para postular y no hubiese "invitado" a otro candidato. He aquí entonces el meollo del asunto: si no tienes partidos, no tienes candidatos; si no tienes candidatos, no tienes propuestas; si no tienes propuestas, no tienes plan de gobierno; si no tienes plan de gobierno no tienes políticas públicas; y si no tienes políticas públicas, ¿cómo gobiernas? Esta realidad se repite incesantemente con los "partidos" en todo el Perú.

Una realidad mucho más preocupante se vive en el interior del país con los movimientos regionales. Cuenta Conmigo, cuyo líder hoy de moda es César Álvarez, presidente de Áncash implicado en un sinfín de delitos y crímenes, maneja la región. Los "comandos" (como se hacen llamar sus militantes), representan lo más nocivo de la sociedad. Un sinnúmero de funcionarios de esta agrupación están denunciados por peculado, lavado de activos, corrupción y hasta asesinatos, como el actual alcalde de la provincia del Santa, Luis Arroyo Rojas, involucrado en el atentado a Ezequiel Nolasco.

Cuenta Conmigo ha hecho del clientelaje una forma de vida política. Se ha dedicado por casi una década al asistencialismo más vulgar y con dádivas en dinero o especie ha empobrecido moral y económicamente a Áncash. Todo esto se ha realizado supuestamente con recursos públicos. ¿De dónde el señor Álvarez sino regalaba por doquier si no tiene ni una bicicleta, como dice Milagros Leiva? ¿Con qué dinero realizaba cuantiosas donaciones públicas? ¿De dónde salieron los dos millones de soles para regalar electrodomésticos en un evento de campaña de Heriberto Benitez?

Y todavía hay más. En Áncash prácticamente la mayoría de los edificios públicos que administra el gobierno regional son de color amarillo, distintivo de Cuenta Conmigo. Un indignante ejemplo es la UGEL-Santa. Además, por todo Chimbote en las obras municipales se lee "Lucho es DesArroyo", eslogan del alcalde comando Luis Arroyo Rojas. ¡Hasta en los carros de basura aparece su rostro! ¿Alguien lo denuncia por proselitismo político? Por supuesto que no, porque dice la gente que los sicarios comandos te matan; y si no te matan los militantes comandos te golpean; y si no te golpean los abogados comandos te querellan; y si no te querellan los pseudo periodistas comandos montan campañas y te difaman y hostigan en sus programas.

Esta realidad no la padece solo Áncash. En la mayoría de regiones los presidentes regionales se saben monarcas absolutos. Es por eso que para ponerle coto temporal a su poder, en el Congreso de la República se viene debatiendo la no reelección para presidentes regionales que el 75% de los peruanos respalda. El primero en oponerse a este proyecto fue Heriberto Benítez, ¿por qué? ¿No dijo su "amigo" César Álvarez que no iba a postular? Además, debemos recordar que la no reelección inmediata es para personas, no para agrupaciones políticas. ¿Por qué se opondría entonces el solidario?

Pero la pregunta de fondo es esta: si yo fuera el líder de un movimiento o partido, ¿por qué tendría que preocuparme si yo no puedo postular pero mi agrupación política sí? Precisamente porque las organizaciones políticas en el Perú, como señalo arriba, no tienen sucesores. Los caudillos no forman reemplazantes sino ayayeros que los halaguen y bufones que los diviertan. Saben que no tienen oportunidad de competir electoralmente si no postulan ellos mismos. Es por eso que hay tantos presidentes regionales asustados.

Aunque usted no lo crea, en Chimbote existen políticos que a pesar de la realidad regional han declarado estar de acuerdo con la reelección. La exalcaldesa de la provincia, Victoria Espinoza, ha manifestado suelta de huesos: "La reelección no perjudica. Cada quien es responsable de sus actos". Espinoza, quien volverá a postular al municipio del Santa por Río Santa Caudaloso, ha sido investigada por enriquecimiento ilícito y lavado de activos. Un tal Luis Costas Moya, candidato a la presidencia regional de Áncash, ha dicho: "Yo creo que una reelección de un periodo más podría ser factible". ¡Qué sinvergüenza! Sin embargo, el candidato a la región por Juntos por el Cambio, Juan Calderón, declaró estar en contra de la reelección regional, e incluso de alcaldes distritales, provinciales y de toda autoridad.

Esto desnuda otro asunto que algunos políticos usan como argumento: la continuidad de la gestión. En el Perú un gobernante electo destruye o construye sobre la obra de su antecesor. No existen planes a largo plazo. No hay una visión de país. Menos de región. Los planes de gobierno no son vinculantes y muchas veces copiados. Las planes de desarrollo concertado son vergonzosos, solo basta revisar este de la provincia del Santa al 2021.

En fin, la democracia se funda en la alternancia de poder, y los macabros y escalofriantes eventos sucedidos en Áncash han demostrado que el exceso de poder se convierte en una patología y vuelve a los hombres contra los hombres. Algunos serán verdaderamente democráticos y otros como César Acuña (Alianza para el Progreso), Luis Castañeda (Solidaridad Nacional) y Humberto Lay (Restauración Nacional), no, pues los estatutos de sus partidos no contemplan realizar comicios internos para elegir a su representante.

La más nefasta de las consecuencias de que el Perú sea un país en constante reelección política, es que los gobernantes vean a los peruanos como electores, no como ciudadanos, ocasionando que traten de complacerlos en lugar de educarlos. ¿Por qué sino tanta cumbia en los eventos públicos? Porque -dicen sin remordimiento ni vergüenza- que eso le gusta a la gente.


Escrito por

César Alberto Sánchez Lucero

Lima, 1985. Escritor y gestor cultural, egresado del Programa de Gobernabilidad y Gerencia Política (PUPC), director de Cola de Lagartija.


Publicado en

República Kafkiana

Espacio dedicado a los absurdos reales que superan la ficción